lunes, 27 de julio de 2009

¿Recuerdas el día que llegaron?

Esta película, que me ha enganchado desde el primerísimo momento y que está magníficamente dirigida por Ole Christian Madsen, se puede considerar una gran obra del cine europeo. La frase que, para mí mejor la describe, es el propio slogan: Cuando la Resistencia deja de resistir para atacar.

Situémonos: Copenhague, año 1944. Ya nos lo dice Flame - hablaremos de él más tarde -: Nazis alemanes. Nazis daneses. La Resistencia no está dispuesta a dejarse vencer. Y aquí entran en acción Bent Faurschou-Hviid, Flame y Jorgen Haagen Schmith, Citron. Podríamos describir a esta pareja que existió en verdad y consideraros héroes daneses, como dos "pistoleros" que disparan sin hacer preguntas. Solo les mueve una cosa: la venganza por la ocupación del país.

Así, aliados con su inmediato superior que recibe órdenes directas de los británicos, se deshacen de los grandes del gobierno pronazi danés. Pero cuanto este superior, Winther, les ordena "abrir fuego" contra dos grandes figuras del espionaje alemán, lo que se sale fuera de sus reglas, es hora de comenzarse a preguntar a quién están matando realmente.

Comienza así un juego entre los principios que les mueven a actuar y las dudas que van surgiendo a flote. ¿Quién es de fiar y quién no? El amor le juega una muy mala pasada a mi Flame...

Flame y Citron. Menudo título, ¿verdad? O en su versión original. Flammen & Citronen. Cuando me acomodé en el sofá para ver la película, mi hermano me preguntó si sabía por qué se llamaba así. Cuando me lo comentó -sigue siendo el experto bélico de la familia-, fue la primera cosa que me llamó la atención. Flame es Flame por el color rojo escarlata de su cabello. Y Citron es Citron porque era mecánico en una fábrica de Citroens. Entonces ya no pensé ¡Menudo título! sino ¡Qué título!

Después vino el color de la película. Es algo inexplicable pero en lo que siempre me fijo de las películas es en el color, casi sinónimo de cálidad. Y el magnífico ambiente. Y esa sublime voz en off de Flame -indiscutible protagonista-: ¿Recuerdas el día que llegaron? ¿Recuerdas el 9 de abril? Después llegaron los tirantes del pantalón de Flame. Y después su pelo. Y las flores, el timbre, el disparo a sangre fría... Y luego todo lo demás. Pero las primeras imágenes son las que de verdad me hicieron sentarme muy quieta y prestar atención a todo.

He leído por ahí que es una visión fría de la Segunda Guerra Mundial y sus consecuencias. Supongo que sí es fría, y quizá por eso te hace estremecerte. Pero, qué queréis que os diga, la voz en off es lo mejor. Aw, y los primeros planos de Flame. Los diálogos, tachados de ser lentos, son para mí realmente interesantes e intrincados y el juego del zoom de la cámara consigue esa atmósfera tensa que caracteriza a la película.


En definitiva, no dejéis de verla si tenéis oportunidad.
Besos!
N


P.S. Mis críticas no son tan buenas como las de Seeinmotions nuevo blog de cine de unos cuantos amigos, pero se intenta.
P.S.2. Algo de publicidad nunca viene mal ;)

1 comentario:

C.Pumpkin dijo...

Nunca había oído hablar de ella...
Pues si es tan buena, habrá que verla :) y me fijaré bien en los tirantes del pantalón de Flame.
Precisamente necesitaba una lista de películas para ver(en cinetube) una de estas tardes, así que me has dado una idea muy buena!
PD: Si lo llegamos a saber antes, podríamos habersela recomendado a Pedro para la clase de social ;)