sábado, 21 de febrero de 2009

¡No somos asesinos, solo defensores!

Hoy se celebra el bicentenario del fin del segundo sitio de Zaragoza y he pensado que un poquillo de Historia no nos vendría mal a ninguno... Ahora acabo de ver el primer capítulo de un documental muy interesante llamado "Zaragoza, ciudad sitiada". De allí he tomado algunos apuntes. Disfrutad!






En el año 1808 Zaragoza contaba con 45.ooo habitantes y era conocida como la Florencia española o la ciudad de las 1000 torres. Al otro lado de los Pirineos, Napoleón, autocoronado emperador, quiere destruir por fin Inglaterra, pero como el aliado de ésta, Portugal, se resiste a obedecer a Napoleón, el emperador decide invadirla. Así se firma el tratado de fontainebleau, a través del primer ministro Godoy - el Choricero -, que permite el paso de los franceses a través de España.


Aquí viene una enrevesada red de la monarquía española, cuando Carlos IV abdica a favor de Fernando VII. Éste, obligado en Bayona por Napoleón, devuelve la corona a Carlos IV, éste la deja en manos de Napoleón y el francés en las de su hermano José I. Esta situación de inestabilidad no podía durar mucho, y el 2 de mayo los madrileños se levantan contra la invasión francesa. La sublevación es reprimida fieramente.


Los testigos madrileños llegan a Zaragoza y los aragoneses se enteran de la noticia. En Zaragoza no sucederá lo mismo que en Madrid. Se niegan a que ocurra y los valientes zaragozanos comienzan a organizarse. Para ello, necesitaban un líder que encabezara la sublevación. El escogido es el general Palafox, que el 26 de mayo es nombrado Capitán General de Zaragoza y el 31 de mayo ya ha declarado la guerra a los franceses, diciendo: "No temáis, aragoneses. Somos invencibles".


Napoleón prepara su ejército de 4000 hombres, que el 16 de junio están en Zaragoza, habiendo dejado tres ciudades aragonesas - Tudela, Mallén, Alagón - destrozadas. Ofrencen la rendición. Pero los aragoneses se niegan a rendirse. El 15 de junio los franceses atacan. Son civiles los que defienden los puntos más débiles de la ciudad, a falta de un ejército organizado. Consiguen entrar en la ciudad, pero allí son reprimidos por grupos de patrióticas mujeres. Los franceses se retiran.




Viendo que con un ataque frontal no podían hacer nada, preparan el sitio. El 30 de junio, tras haber tomado Monte Torrero, el bombardeo comienza. Y esa noche sucede algo asombroso. Los franceses, tras muchas horas de herir a los aragoneses con su artillería, consiguen abrir brecha en la batería del Portillo y se deciden a entrar. En ese mismo momento, Agustina, una joven aragonesa, va a llevar provisiones a los civiles zaragozanos y al encontrárlos a todos muertos, en ella arde también el deseo de ayudar a su ciudad. Anda hacia el cañón más cercano, enciende su mecha y de esa manera frena el avance francés.


El 4 de agosto, los franceses penetran hasta la calle del Coso, pero los aragoneses contratacan con barricadas. Los franceses toman Sta. Engracia.

Cuartel General Sta.Engracia - Paz y capitulación.
Cuartel General de Zaragoza - Guerra y cuchillo.



¡Zaragoza, siempre heroica e inmortal!

Enlaces de intrés:

http://agustinadearagon.com/
http://lossitiosdezaragoza.com/
http://www.heraldo.es/especiales/sitios1808/index.html

1 comentario:

Carlos dijo...

¡Hola! ¡Muy buenos apuntes! Yo también vi ese documental, me pareció muy interesante; creo que los Sitos de Zaragoza es un capítulo de nuestra historia muy apasionante.

¡Un saludo!